La platería en las iglesias de Olmedo.


La platería en las iglesias de Olmedo.

La magnífica exposición que, coincidiendo con la Semana Santa del año 2007, se muestra en la villa de Olmedo constituye toda una revelación, pues hasta el presente la mayor parte de las piezas ahora expuestas eran prácticamente desconocidas. El justificado celo puesto en su conservación y custodia, ha dado lugar a que ese rico y variado tesoro de orfebrería religiosa haya permanecido hasta ahora prácticamente inédito. Salvo alguna excepción, el resto de piezas pertenecientes a las distintas iglesias parroquiales de Olmedo no había sido exhibido hasta ahora ni tampoco estudiado. De ahí el extraordinario interés que reviste esta exposición, que viene a completar nuestro conocimiento de la platería en la provincia de Valladolid.

Las piezas muestran un variado repertorio que va desde la platería de fines del siglo XV y la del renacimiento hasta las de estilo barroco y rococó. Por sus punzones comprobamos que las del siglo XVI en su mayoría
proceden de los talleres de Medina del Campo y Ávila, destacando algunas de ellas marcadas por los Alviz, afamados plateros abulenses. De tan variado conjunto de piezas destacan las cuatro cruces parroquiales, ejemplares de muy buena calidad. La más antigua es una cruz gótica flordelisada de finales del siglo XV con bellas placas grabadas en sus brazos. Le sigue una formidable cruz plateresca, perteneciente a la iglesia de San Miguel, obra de muy rica decoración de grutescos “a candelieri”. La tercera es de la segunda mitad del siglo XVI, también de fabricación abulense y de un estilo ya manierista. Perteneciente a la iglesia de Santa María, ofrece una rica iconografía tanto en su cruz propiamente dicha como en su hermoso castillete. La cuarta y última cruz parroquial pertenece a la iglesia de San Pedro, como se comprueba en el medallón del reverso, en el que se efigia a San Pedro como pontífice sentado en cátedra.
La serie de cálices de plata que se conservan constituye todo un muestrario de excelentes ejemplares que van desde finales del gótico a los de época neoclásica, pasando por dos piezas realmente espléndidas que corresponden al pleno renacimiento y al estilo rococó de mediados del siglo XVIII. En los cálices góticos y renacentistas comprobamos de nuevo las marcas de Medina del Campo y de Ávila punzón de Alviz-, centros en los que se labraron la mayoría de las piezas de las iglesias de Olmedo.
Asimismo son muy interesantes las custodias de tipo sol conservadas, las tres del siglo XVIII. Dos de ellas son de talleres salmantinos, como ponen de relieve sus punzones de localidad y de los plateros que las marcaron Villarroel y Figueroa. Especialmente notable es la primera que responde a la conocida tipología de ángel tenante del viril, obra de cuidada factura y suntuosa decoración. La mejor no obstante es la tercera custodia, que ostenta marca de Madrid y de un platero denominado Donato. Es pieza cortesana de muy elegante diseño y con decoración de pedrería, tal vez encargada y donada a la iglesia de San Miguel por Don José de Alaiza y Zuazo, jefe de las Reales Tapicerías del rey Carlos de Nápoles y las dos Sicilias (luego Carlos III de España) y ayuda de cámara del monarca, a cuyas expensas se realizó en 1746 la capilla de la Virgen de la Soterraña.

Completa el conjunto de piezas expuesto una variada serie de piezas de muy diferente función y tipología, ejemplares que van desde unas crismera de finales del gótico a una hermosa naveta del primer cuarto del siglo XVII con escudo del donante, pasando por dos incensarios de época barroca, varios pares de vinajeras, un juego de sacras del siglo XVIII, coronas de la Virgen, “lunas” de plata pertenecientes también a imágenes de Nuestra Señora, candeleros, etc. De todo ese variado conjunto destacan como piezas más notables un excelente hostiario y una cruz de altar, ambas del siglo XVI y decorados con relieves con ornamentación de grutescos. En suma, como podemos comprobar en la citada exposición, las iglesias de Olmedo han conservado una colección de platería muy sobresaliente, totalmente desconocida hasta ahora y con ejemplares de muy buena calidad. Se trata de un verdadero tesoro de platería eclesiástica que constituye un valioso legado de siglos pasados, un conjunto de orfebrería religiosa que debemos conservar con esmero y que desde ahora ha de ser muy tenido en cuenta dentro del rico e importante patrimonio artístico que aún conserva la histórica villa.

José Carlos Brasas Egido
Catedrático de Historia del Arte
Universidad de Salamanca

Cruz Procesional gótica, de finales del siglo XV, perteneciente a la época de los Reyes Católicos, con marcas de Medina del Campo, plata en su color con elementos sobredorados; decoración botánica muy rizada; extremos flordelisados con rosetones calados de tracería gótica. En los brazos lleva placas cuatrilobuladas con figuras grabadas, algunas descolocadas; así, en el anverso deberían ir la Virgen y San Juan formando la escena del Calvario y en el extremo superior un ángel con filacteria; en el reverso lo correcto es fueran los símbolos de los Evangelistas. Figuran representados: el tema de Adán resucitado; en el centro del anverso, el Crucifijo con paño de pureza sobredorado, así como la barba y el cabello; San Juan con el águila.; Virgen dolorosa,; el Agnus Dei; el toro de San Lucas. En el reverso, Padre Eterno, Resurrección y el tema del Pelícano en el derecho.


Cruz procesional de la iglesia de San Miguel, renacentista, primera mitad del siglo XVI, con punzones de la ciudad de Ávila, ROZAS y ALVIZ. Plata en su color a excepción de la imágenes del santo titular, en el centro del reverso, y del Calvario, en el anverso, que están sobredoradas; los brazos cubiertos con relieves con motivos de grutescos renacentistas, “ a candelieri”; en los extremos, medallones circulares con cabezas de Profetas, en los del reverso, medallones con cuatro Virtudes.




Cruz procesional de la iglesia de Santa María del Castillo, renacentista, de hacia 1570; Plata en su color, dorada en las figuras, con medallones ovalados en los extremos. Presenta las siguientes imágenes: en el anverso: Cristo, la Virgen y San Juan; en el extremo superior, el tema eucarístico del Pelícano, y en la parte inferior la Virtud de la Prudencia, con el espejo; en el reverso, en el centro la Asunción de la Virgen María y los cuatro Evangelistas; en los brazos decoración muy rica, a base de amorcillos y otros temas.





Pie de cruz (también denominado castillete o macolla), perteneciente a la cruz parroquial de Santa María, plata, renacentista, de hacia 1570; en forma de templete de dos cuerpos, con columnas jónicas; en el cuerpo superior e inferior, pequeñas figuras de apóstoles. Marcas de Ávila con punzón de ALVIZ.


Cruz procesional de la Iglesia de San Pedro, con Crucifijo y San Pedro como pontífice de plata sobredorada, en el centro del anverso y reverso respectivamente, así como los medallones de los extremos, todos ellos en plata sobredorada, el resto de la cruz es plata en su color. Marcas de Medina del Campo. Se distinguen un punzón LOPE y otro punzón VA, la iconografía que aparece en los medallones son los Padres de la Iglesia, y los Evangelistas. Los medallones parecen aprovechados y pueden fecharse en siglo XVI; la cruz parece obra de comienzos del siglo XVIII.




Pie de cruz, reformado, plata, del primer cuarto del siglo XVI, con añadidos del XVII, la estructura arquitectónica es muy renacentista, punzón: DIEGO VALLE.

Custodia de tipo sol, rococó, de mediados del siglo XVIII, plata sobredorada y en su color, con viril rodeado de rayos y con gloria, Padre Eterno, cabezas de ángeles niños y símbolos eucarísticos (racimos de uvas y hojas de parra), el sol es soportado por la figura de un ángel niño con los brazos en alto, que hace de atlante alzando el viril, el pie de la custodia lo integra un trono de nubes en forma circular. Lleva punzón de Salamanca y del platero VILLARROEL.






Custodia de tipo de sol, de mediados del siglo XVIII, plata en blanco y sobredorada; salmantina (punzón: 83 SILVA, seguramente del marcador, y del platero FIGUEROA). Se decora con relieves con los habituales motivos eucarísticos, cabezas de ángeles niños, etc.








Custodia de tipo de sol, del siglo XVIII. Plata sobredorada, madrileña, con viril con piedras preciosas, con rubíes y brillantes, tiene resplandor de rayos, hojas de vid, racimos de uvas, peana en forma de balaustre, en el pie aparece el pelícano, el Agnus Dei. Punzón: “DONATO”, con castillo y 73. Dado su elegante diseño y su carácter cortesano, tal vez pudiera apuntarse como una posible donación de don José de Alaiza y Zuazo y en ese caso procedería de la iglesia de San Miguel.





Custodia de sol. Plata en su color. Estilo neoclásico, primeras décadas del siglo XIX, plata en su color.









Custodia de sol. Plata, de mediados del siglo XIX.

Cáliz. Plata sobredorada, de hacia 1530, renacentista, con detalles de influencia todavía gótica, con imagen en relieve de San Miguel, inscripciones en caracteres góticos IHS / XPS (anagrama del nombre de Cristo y del anagrama de la Virgen María. Punzón: F.CALVO y otro en el que se lee (con dudas): CECILIA.







Cáliz. Plata sobredorada, hacia 1540, marca de Medina del Campo, punzones: ROMAN, y ALONSO CABEZA. En el pie lleva en relieve el anagrama del nombre de cristo, y las cinco llagas.








Cáliz. Plata sobredorada, de hacia 1540, del mismo tipo que el anterior, con decoración de gallones. En el pie: el anagrama del nombre de Cristo, plata dorada..








Cáliz renacentista, plata dorada, de hacia 1560, rica decoración de grutescos y motivos “a candelieri”. Aunque no se distingue punzón, parece obra abulense, de la época y estilo de los ALVIZ.








Cáliz barroco, del siglo XVIII, plata sobredorada, de estilo rococó, salmantino, punzón: 59/ MONTERO (seguramente como marcador), y otro, probablemente de autor: CARDEÑOSA,. Con motivos eucarísticos del Agnus Dei, el Pelícano.








Cáliz, plata en su color, de hacia 1600, estilo un tanto sobrio y austero, con poca decoración: ángeles en el pie, y ornamentación de gallones.










Copón plata en su color, de la segunda mitad del siglo XVII

Cáliz, plata en su color, liso, de la segunda mitad del siglo XVII.










Cáliz, plata en su color siglo XVII.










Cáliz, plata, de comienzos siglo XVII, de pequeño tamaño con tapa, utilizado como hostiario.










Naveta, siglo XVII, plata en su color, interesante ejemplar; lleva grabado un escudo, con veneras y castillos, y se lee sobre la tapa: “ San Pedro de Olmedo”. Como es sabido las navetas hacen referencia al simbolismo de la Nave de la Iglesia.





Hostiario, plata en su color, de hacia 1570, probablemente abulense.








Cruz de altar, renacentista, punzón: AV, hacia 1580.











Cruz de altar, siglo XVIII, salmantina, y punzón 53 del platero DAVILA.











Cruz de altar, neoclásica, punzón: GONZALEZ, marca de Castilla y León, de finales del XVIII.










Corona de la Virgen, plata sobredorada, de comienzos del siglo XVII; ha perdido varias piezas, con temas alusivos a las virtudes de la Virgen.









Corona de la Virgen, comienzos del siglo XVIII, plata en su color.
Corona de la Virgen, siglo XVII. Pequeña corona que en una hermosa escultura de la Virgen con el Niño con palomas en su mano, obra del Siglo XVI.









Juego de Vinajeras, plata, siglo. XVII.
Juego de Vinajeras, plata, siglo XVIII.








Juego de Vinajeras, siglo XIX, con punzón: M FUERTES y marca de Castilla y León.
Juego de Vinajeras, madrileñas, con punzón de la fábrica de MARTINEZ, comienzos del XIX, estilo neoclásico.

Crismera gótica, plata, de hacia 1520, con escudo del donante, con tres veneras y dos lebreles y espada.







Media luna de la Virgen, plata: Lleva fecha de 1736 e inscripción: “DIOLA DE LIMOSNA QUE JUNTÓ JOSEPH VAZQUEZ, HALLÁNDOSE MAYORDOMO”.






Rostrillo de la Virgen, plata, sobredorada, siglo XVII.











IHS, plata, siglo XVIII










Rostro de la Luna, plata, marca de Valladolid, siglo XIX.
Incensario, plata, del s. XVIII , punzón de Valladolid y GUA








Incensario, plata, de mediados del siglo XVIII, punzón de Salamanca, MONTERO 59 y ESPINOSA.







Incensario, plata, siglo XVIII.








Candeleros de altar, plata Meneses, siglo XIX.








Sacras, plata, siglo XVIII.































Atril, plata Meneses, XIX










Atril, siglo XIX, bronce










Atril, bronce, moderno.
Acetre, plata, finales del siglo XVIII.










Pie de cruz parroquial, del renacimiento, de mediados del siglo XVI, plata en su color. Incompleto y en mal estado de conservación